La historia se basa
en el best-seller autobiográfico de Elizabeth Gilbert, algún crítico se ha
cebado con él, vaya por delante que no he leido nada de esta autora.
La película, desde mi punto de vista, entretenida para verla en
casa con un bol de palomitas, teniendo su nota de humor cuando se escucha la voz brasileira
de Bardem, pero lo importante es que escuché
una frase que me llevo a tomar nota y buscar el contexto en el que se
encontraba, dice:
Todos queremos que
nada cambie. Nos conformamos con vivir infelices porque nos da miedo el cambio,
que todo quede reducido a ruinas; pero al contemplar ese sitio, el caos que ha
soportado, la forma en la que ha sido adaptado, incendiado, saqueado y luego
hallado el modo de volverse a levantar, me vine arriba. A lo mejor mi vida no
ha sido tan caótica y es el mundo el que lo es, y el único engaño es intentar
aferrarse a ella a toda costa. Las ruinas son un regalo. Las ruinas son el
camino a la transformación…
…….debemos
estar siempre preparados para infinitas oleadas de transformación. COME, REZA, AMA (2010)
Aunque su contexto está
emparentado con las relaciones interpersonales de amor y desamor, incluso con
la destrucción de Roma y su renacimiento, igualmente me sugiere su traslado al
mundo de la política, la democracia y la economía actual ya que según parece van camino de la ruina, no me agradaría
llegar a tal situación para después renacer, me gustaría pensar que estas
oleadas de transformación que han de venir no sean únicamente unidireccionales
como está ocurriendo en la actualidad, los cambios transformadores deben llegar a todos los ciudadanos como siempre ha ocurrido tras una gran debacle.
¡¡Ah!! ¿para cuando el Congreso?.
¡¡Ah!! ¿para cuando el Congreso?.
Emilio M. Martín
Efectivamente somos reacios a los cambios y se hace casi imprescindible renacer de las cenizas. Una buena metáfora para la vida política de hoy.
ResponderEliminarDe todo se aprende, la verdad, y si encima le sacas un beneficio, como a los cascotes de la ruina del muro de Berlín, miel sobre hojuelas.
ResponderEliminarA causa de las ruinas del muro de Berlín vienen estos lodos.
ResponderEliminarUn abrazo Juli.
Si he de reconocer que la frase de la película ha venido a pelo en cualquier sentido que uno quiera darle.
ResponderEliminarUn brazo Francisco.
Hola Emilio: a la vista de lo ocurrido,Los Mercados han ganado,hemos perdido todos.Esos mismos mercados que no saben nada de corazón,menos de transformaciones,que como robots han tomado vida propia,incluso poniéndose en contra de sus creadores.
ResponderEliminarY mientras que algunos caen hacia el infierno del fracaso,otros ,los que ascienden de ellos,bastante si consiguen no caerse.
Se impone la transformación de fondo y de todo,de momento muchos siguen escuchando cantos de sirenas...para cuando se imponga una transformación,espero,tan sólo espero que no se haya acumulado demasiado dolor.
El Congreso ese me parece que se queda corto en nuestro ámbito,supongo que se hará,pero tendrá que ir más allá de Los Pirineos.Un abrazo y feliz semana
Querido Emilio Manuel: Antes se decía: "Vale más
ResponderEliminarlo malo, conocido, que lo bueno por conocer" Pero, claro todo esto en la vida real, no en la política. Quizás en esta última haya que empezar por las ruinas para luego resurgir como
el ave Fénix, o Santander, mi pueblo, que tuvo que incendiarse para resurgir de sus cenizas. Un fuerte abrazo.
No creo que haya que hacerlo como en el 74 en Suresnes del que salió Felipe González, me conformo con que se haga en cualquier lugar de España pero con ideas de izquierda renovadas, gente nueva y que ilusione no solo a sus militantes sino a la ciudadanía.
ResponderEliminarQue los mercados ganarían, era evidente, ya tenemos los ejemplos de Grecia e Italia, terminarán por comerse Europa si antes no hay una transformación importante, como digo en la entrada, de las ruinas de la democracia tiene que salir el camino a una transformación. Un abrazo.
No me gusta ese refrán Olegario.
ResponderEliminarComo persona de izquierda, considero que estaba cantado la perdida de poder por lo mal que lo han hecho, no esperaba esta mayoría aplastante, por ello el socialismo tiene que transformarse, poner caras nuevas, puede que le tenga que pasar como le pasó a Santander, que arda por los cuatro costados y que renazca de nuevo. Un abrazo
En todas las etapas de nuestra vida tenemos que aprender a salir de las ruinas y renacer como las cenizas.
ResponderEliminarLa vida es hermosa para algunos privilegiados, para otros es un infierno vivir en la tierra.
Besos de luz para ti.
MA.
MA, no se que decirte, porque llevas razón, he podido comprobar como nuestros pobres, los pobres españoles son "privilegiados" entre los otros pobres que he visto en Perú, Nicaragua o Marruecos, solo por decirte países que conozco, no quiero decir nada si los comparamos con los pobres de la India o los Somalíes, etc... Un abrazo.
ResponderEliminarAunque las transformaciones duelen, lo más importante es elegir lo mejor para efectivizarlas. Ojalá que en lo referente a la política, no se arrepientan de lo que hayan elegido para renacer. Que los políticos trabajen con responsable humanidad para que dejen de sufrir los pueblos. Un abrazo.
ResponderEliminarNo se si los políticos que han elegido las urnas en el día de ayer, va a tener valentía de enfrentarse a los mercados que nos atenazan o simplemente van a ser "la voz de su amo", me temo esto último. Un abrazo Alma.
ResponderEliminarA mí la película me gustó,quizá por Julia Roberts que me encanta.
ResponderEliminarY también por el contenido donde el cambio apabullante,el arrojo,ese inconformismo entristecido y al fin la apatía rota,me parecen temas interesantes.
Y en cuanto al ámbito poítico,pues...lo dejaremos correr a ver qué pasa.
Un abrazo.
La Roberts me gusta o mejor dicho me gustaba su sonrisa, conforme envejecemos somos un poco verdes y nos gustan mas jóvenes por ejemplo Rachel Weisz :-P
ResponderEliminarEn cuanto a lo otro, a lo hecho pecho y a meter presión.
Un abrazo.
Hace tiempo que vi esa peli y coincido contigo que es de las de ver en casa en una tarde tontorrona, ni me fijé en la frase. Ahora te la agradezco.
ResponderEliminar¡Buena entrda y más aún sus "derivaciones"!
Lo de la frase, es curioso que la pillara, normalmente la tele la suelo ver con un libro en las manos ojeando lo que emiten por la tele muy de vez en cuando, seguro que la peli la seguí por que Julia Roberts es/era de una de mi actrices fetiche. Un abrazo.
ResponderEliminarAndo pelín empachada, así que me quedo con la reflexión desde la parte intima y personal.
ResponderEliminarPilar, hay tiempo p'a tó. Un abrazo.
ResponderEliminarUna buena cosa es desde luego ver una divertida película y quedarse con un pensamiento. Eso tendríamos que hacer todos.
ResponderEliminarEs una forma de ver cine como otra cualquiera, en la facultad aprendí, gracias a la asistencia de varias clases sobre cine, a desmenuzarlas y a analizarlas de punta a cabo, te digo que es muy cansado. Un saludo hombre de a pié
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