Ha
terminado el curso escolar 2011-2012, hoy acudo a la fiesta de fin de curso de mis nietos de 4 y 5 años; comienzan las vacaciones de alumnos y
profesores (prefiero la palabra maestros), unos maestros que han
sido tildado de vagos y casi de maleantes por defender una sociedad del conocimiento y
del aprendizaje, con una escuela publica y para todos, el Magisterio
está siendo atacado por una parte de la comunidad, por los políticos con sus
recortes en educación, en investigación, en becas para el estudio, por unos
padres que malinterpretan el concepto de libertad y autoridad, por unos hijos que, siguiendo la imagen de sus padres, le han perdido el respeto al maestro y finalmente por unos maestros que viéndose desamparados están desmotivados, la escuela nunca
debe de ser un lugar de enfrentamiento, ahí están nuestros hijos y nietos, el futuro de cualquier país,
debemos tratarlo con mimo y ¡¡no, no lo estamos haciendo!!.
Dentro
de un par de meses comenzará el curso 2012-2013 muchas cosas van a cambiar, las más evidentes: menos profesores y más alumnos por aula, seguro que dentro de unos años nos arrepentiremos de esos cambios. Es en estos momento difíciles cuando hay que
recordar las palabras de una gran educadora como fue María
Zambrano que nos decía: “ser maestra es dar
tiempo y luz para que cada cual pueda hacerse esa pregunta que lleva dentro
agazapada en su interior y que ni siquiera sabía que la tenía. Yo me he
preparado especialmente para cuidar la relación, abierta a lo que pueda suceder
aquí y ahora.”
Emilio
Manuel M.