Pese a no ser
muy amigo de leer los premios Planeta, este año he comenzado con la lectura del
que ha quedado segundo tras el engaño de Carmen Mola, su título “Últimos días
en Berlín” de Paloma Sánchez-Garnica, de la que ya he leído varios de sus
libros con agrado.
En este, del que voy por las
primeras hojas, ya ha merecido la pena, me ha llevado a Joseph Goebbels, político
alemán que ocupó el cargo de ministro para la Ilustración Pública y Propaganda
del Tercer Reich entre 1933 y 1945. Uno de los colaboradores más cercanos de
Adolf Hitler.
No, no se me ha ido la “olla”, no he
cambiado de camisa ni de chaqueta a estas alturas de mi vida, es que he podido
leer, gracias al libro, sus “once principios de la
propaganda”, y una vez leídos, pienso, ¡¡anda la leche, esto me
suena!!, lo había visto y leído en la prensa amiga de ciertos partidos que lo aplican sin saltarse una coma;
por ejemplo este principio se está usando en plena campaña de las “macrogranjas”,
se llama: “Principio de orquestación”
y dice:
“La
propaganda debe limitarse a un número pequeño de ideas y repetirlas
incansablemente, presentarlas una y otra vez desde diferentes perspectivas,
pero siempre convergiendo sobre el mismo concepto. Sin fisuras ni dudas”. De
aquí viene también la famosa frase:
"Si una mentira se repite lo suficiente, acaba por convertirse en
verdad".
Hay otro principio que igualmente lo he
escuchado mucho, Goebbels le llamó: “Principio
de la transposición”.
“Cargar
sobre el adversario los propios errores o defectos, respondiendo el ataque con
el ataque. Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las
distraigan”.
Hay
otro “principio llamado de silenciación”
que consiste en “acallar las cuestiones
sobre las que no se tienen argumentos y disimular las noticias que favorecen el
adversario, también contraprogramando con la ayuda de medios de comunicación
afines”, ¿quién no ha notado esto?.
Hay un principio muy recurrente y que es muy escuchado y leído, es el llamado "principio de la exageración y desfiguración", es el que trata de "convertir cualquier anécdota, por pequeña que sea, en amenaza grave", ¿os suena?
Hace casi 80 años, que ese régimen nazi
fue derrotado por fuerzas democráticas, parece que de nuevo está sacando la
patita, aquí ya tenemos casos muy claros, creo que es para preocuparse, la lectura de esos principios, que están en la red, y su aplicación en la actualidad por parte de políticos y medios de información "amigos" dan muestra de ello.
Tengo el libro pero aun no lo he leído, siempre acabo comprando los "Planeta" a pesar de que creo que esta sobrevalorado como muchos premios. y casi siempre me gusta mas el segundo que el primero, En cuanto acabe con Marina me pongo a leerlo.
ResponderEliminarHablando de publicidad, has visto el anuncio televisivo de PIKOLIN .https://youtu.be/x_z4YYpRqnQ. Un abrazo
El anuncio me ha recordado en sus primeros compases musicales la canción "Aleluya nº 1" de Luis Eduardo Aute, un anuncio que se sale de los causes normales y machacones pero no debemos de olvidar que su misión es vender cuanto más mejor y por bonito que sea no deja de ser lo que intenta ser, un producto que incita a la compra.
EliminarSaludos
En el anuncio canta Massiel, es lo que he leído y si recuerda Aleluya. Una vez me dijeron que si se habla mas del anuncio que de la marca la publicidad no es buena. Feliz lunes
EliminarPara lo ignorantes que son nuestros políticos, hay que ver lo bien que se saben estos principios que hoy nos cuentas.
ResponderEliminarUn abrazo.
En el fuero interno de nuestro políticos y en el de muchos ciudadanos aún quedan reminiscencias de un pasado dictatorial.
EliminarSaludos
Esa manipulación es la que me tiene alejado del ruído de los medios. Se hace insoportable.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es lo mismo que dice mi hermano, sin embargo a mi me supone mirar más y analizar otros medios reflexionando sobre las noticias y lo que hay detrás de ellas.
EliminarUn abrazo
Hay muchos que han aprendido de donde no deberían...
ResponderEliminarY tanto.
EliminarHombre, los leales discípulos, lo mejor que pueden hacer es aprender bien la lección del jefe. Al fin y al cabo a los nazis les funcionó estupendamente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es cierto, pero luego la cagaron, ¿Lo vuelven a repetir?.
EliminarUn abrazo.
Pues si que parece que están sacando la patita. Y deberian no olvidar el pasado, que parece que se saben muy bien ciertos principios y así nos va.
ResponderEliminarBuena noche.
Un abrazo.
Parece que lo han olvidado.
EliminarSaludos
Emilio si no hay nada nuevo bajo el sol... y los de ahora ni si quiera inventan, copian. que no se sabe que es peor.
ResponderEliminarLo peor es que no se dan cuenta que al final la historia se vuelve a repetir.
EliminarSaludos
Hola.
ResponderEliminarAl leerte he viajado al pasado. Mi madre (y mi padre, pero ella y mi abuelo especialmente) me repetía mucho esos principios, mencionando a Goebbels. Cada vez que pasaba algo negativo para los gobernantes surgía "otra cosa" que mi madre decía que era una cortina de humo para distraer. Y si yo, que era joven e inexperta intentaba rebatirlo, me decía todo lo que tú, tan bien, has resumido.
Claramente la vida es cíclica y la historia se repite.
Muy feliz día.
Es mi miedo, que se repita.
EliminarSaludos
Pareciera que el arte de gobernar; es el arte de mentir de manera profesional. Eso de "la verdad os hará libres", debería ser un paradigma de la Administración. Oye amigo, que mucha gente cree en esas mentiras y asumen anti valores como valores; hay gente que cree que los de piel blanca son mejores que los demás (los mestizos, negros, indios o mulatos), que los europeos son más que los latinoamericanos o africanos. El nazismo no solamente es un sistema político racista de ultraderecha, es un modo de vida que anda por las calles. Saludos cordiales. H.
ResponderEliminarNo te puedo negar en absoluto lo que dices, es más, lo ampliaría, por ejemplo el nazismo es además de una política supremacista es excluyente hasta llegar a intentar liquidar a un pueblo.
EliminarSaludos
Me asustan esos indicios y que se vuelva a repetir etapas de la historia que deberíamos tener aprendidas, pero como he leído más arriba, creo que la vida es cíclica y la historia se repite.
ResponderEliminarMuy buena entrada, Emilio.
Buen día.
Abrazos
Está claro que no aprendemos, de seguir así vamos abocado a lo mismo que en el siglo XX ocurrió en dos ocasiones y en España una.
EliminarSaludos
Es un clásico, lo triste es lo vuelven a utilizar y mucha gente lo compra.
ResponderEliminarEstamos volviendo a los años 20/30. Un siglo más tarde estamos con las mismas estupideces.
Saludos.
El problema es que esas estupideces hay mucha gente que se las toma en serio y luego pasa lo que pasa.
ResponderEliminarMe llegue a saludarte,buen finde amigo.
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