Leer nunca es malo y, en tiempos de
confinamiento, la lectura te saca las malas ideas de la cabeza, al tiempo que evita estar al tanto de las memeces que sueltan por los medios ¿nuestros prohombres?.
En una de esas lecturas, leo sobre la curiosidad de saber cada vez más que hemos tenido los humanos desde que somos "Sapiens", Harari lo ha repetido en varias ocasiones en sus
textos, es el mito de la manzana, uno de esos mitos lo cuenta la Biblia, el otro lo narra Isaac Newton cuando pensando a los piés de un árbol, le cae en
la cabeza una manzana.
Esto es lo que leo: En el mito del Jardín del Edén, los humanos son castigados por su curiosidad y por su deseo de obtener conocimiento. Dios los castiga con la expulsión del Paraíso. En el mito del jardín de Newton, nadie lo castiga; todo lo contrario. Gracias a su curiosidad, la humanidad consigue una mejor comprensión de lo que es el universo y da un paso hacia el paraíso tecnológico.
Se pregunta el autor ¿los científicos nos transformarán en dioses?, no quero ser ningún dios, personalmente solo me conformaría con el hecho de que los científicos les arreglaran la cabeza, la educación y el conocimiento a muchos de nuestros políticos; sin ser dioses, se creen que son la leche.¡¡Que mala es la soberbia!!
PD/ Esta entrada me la ha sugerido el libro de:
Autor:Yubal Noah Harari.
Título: "Homo Deus. Breve historia del mañana"
Editorial: Debate.
Nº Páginas. 496.
Orgullo, soberbia, petulancia... Incluso para ser un gran científico hace falta un poco de humildad. Y qué decir de "tus amigos" los políticos.
ResponderEliminarUn abrazo.
¿Mis amigos?, una cosa es creer en la política como administración de lo común a todos, y otra cosa es creer en aquellos que la administran, pese a haber jugado algo a la política, ahí no tengo amigos, solo conocidos.
EliminarUn abrazo. Veo que has cambiado la foto de perfil, muy bonita.
Los científicos tiene fama de distraídos, los pintores de exagerados, los políticos cumplen con todo lo demás, son un gremio empoderado, palabra fea, que miente y presume de hacerlo. Un abrazo
ResponderEliminarPrejuicios.
EliminarSaludos.
Hablas del mito de la manzana, pero mientras haya quien justifica y encumbra a quien mete en el mismo saco "peras y manzanas", esto ni Dios ni los científicos lo arreglan.
ResponderEliminarUn abrazo.
Seguro que puede haber un momento que se podrán juntar peras y manzanas y su resultado será peramanzana, los hombres pondrán pegas pero la ciencia y sus trabajos avanzan pese a ellos.
EliminarUn abrazo.
Poco arreglo tiene esta gente. A los políticos no los arregla ni Dios, así que mucho menos los científicos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Los políticos no será arreglados, pero los científicos actúan, de no ser así aún estaríamos en la edad de piedra.
EliminarUn abrazo.
Copiaría el comentario de Ester,abrazo.
ResponderEliminarTe respondo lo mismo, prejuicios.
EliminarSaludos
Yo me quedo con el mito del jardín de Newton.Los políticos no tienen arreglo, son una especie aparte. No sési habrá alguno que se salve.
ResponderEliminarSaludos
Por suerte hay muchos políticos que se salvan, unos pocos sinvergüenzas no pueden manchar a todos aquellos alcaldes, en donde hay algunos, que trabajan a cambio de nada. Es lo que pretenden algunos que se generalice de que todos son una panda de ladrones y los dejemos hacer.
EliminarSaludos
Leí en alguna parte que todos los ciudadanos se quejan de sus políticos. Al leerte me ha venido eso a la mente y hasta me ha hecho gracia. Aunque, a decir verdad, no es tan gracioso si miramos las consecuencias. En este caso, estaría bien que las mejoras empezaran por ahí. Pero, no veo yo que sea empresa fácil emprender aquello. Digo, tendremos que conformarnos por muchos años con lo que nos va tocando. Y como siempre, a algunos les tocan peores que a otros.
ResponderEliminarSaludos
Es verdad que nos quejamos mucho de nuestros administradores, tampoco los ciudadanos somos demasiado beligerantes, lo mismo que tenemos grandes brotes de quejas nos desinflamos y no pasa nada, los ciudadanos también tenemos responsabilidades que no asumimos o mejor, no reflexionamos suficiente, por nuestro carácter lo mismos que aguantamos cuarenta años de dictador, tendremos que seguir aguantando, sabe dios cuantos, de democracia "regulera".
EliminarSaludos
La curiosidad es la madre de las ciencias, me gusa cuando veo a los niños preguntar y preguntar, será porque yo era preguntona, pero más me gusta ver a sus familiares contestar y contestar.
ResponderEliminarEstá muy bien lo que comentas, pero la educación en España no va dirigida en fomentar la curiosidad de los niños.
EliminarSaludos
Pobres científicos, qué te han hecho para que les encargues algo imposible...
ResponderEliminarNo te creas, empezaron con la utilización del fuego, luego con la rueda, más tarde la imprenta, luego los motores, más tarde viajar a la luna, después el ADN, las vacunas, la inteligencia artificial, etc..., paso a paso lo harán.
EliminarToda una utopía lo que propones para los pobres científicos. En efecto la educación nunca ha ido dirigida en fomentar la curiosidad, incluso si la historia no interesa se oculta, así nos va en todos los campos. Cuídate mucho.
ResponderEliminarAbrazote utópico.-
No es utopía, aunque nosotros muramos mañana, miremos lo que hemos pasado (70.000 años) y lo que le queda por delante a los científicos.
EliminarSaludos
Me parece que estamos como estamos porque también científicos y técnicos han creído que eran capaces de doblegar nuestro ecosistema y ponerlo al servicio de los beneficios del capitalismo. Un desastre.
ResponderEliminarNo hay ciencia ciencia, toda está subvencionada por empresas, gobiernos, etc. La idea de una ciencia basada en la curiosidad ha desaparecido... me parece a mi ehhh
Un abrazo.
La ciencia siempre ha sido utilitarista, con el fuego se conseguía una mejor y mas fácil alimentación y digestión para la humanidad, con la rueda un mejor y fácil transporte, con el ADN conocer mejor al ser humano y no sabemos hasta donde puede llegar, algunas cosas pueden no gustar, etc, esto da para un libro.
EliminarLa ciencia es capital, necesita dinero, los científicos no viven del aire ni se hace con aire, todo se pretende que se haga para un bien general aunque es verdad y no te lo niego que luego están los pocos que se benefician de ello económicamente, es el caso de la vacuna y las malditas farmacéuticas y no solo esto.
Un abrazo