Se acabó lo que se daba, pese al
calor que hemos soportado, desconozco las "olas de calor" que nos han anunciado, no lo hemos pasado mal de todo, mucha piscina, algo
de montaña, bastante lectura y cuando no, aire acondicionado.
Ha sido un mes, para los políticos, muy movido, antes se tomaban descanso en agosto y nos dejaban descansar de sus peleas, este mes, entre Puigdemont, las pateras y mitineros más que racistas han conseguido que apenas haya puesto la tele salvo para ver las Olimpiadas de París, eso sí que me he dado un buen tute sobre todo atletismo y Judo, lo practiqué en mis tiempos mozos, ahora me encuentro viendo los Juegos Paralímpicos, es impresionante ver como personas, sin brazos nadan y ganan en la piscina o corren con protesis en las piernas o personas ciegas corriendo o nadando, la cuestión es, ¿como no le dan los medios de comunicación la misma importancia que las Olimpiadas?, es una pena, parece que hay dos tipos de juegos olímpicos: los buenos, y los otros, tampoco he dejado de ver la Vuelta Ciclista a España que concluye dentro de una semana.
He dicho bastante lectura, tengo un libro entre manos que me está durando demasiado se titula “Zuleija abre los ojos” de Guzel Yájina, dicen que es muy bueno y tenemos que comentarlo en el club de lectura, a mi me está resultado un auténtico coñazo, nos coloca en la Rusia Roja de los años 30 y como es la vida en un Gulag.
Y
este ha sido mi mes de agosto, ahora se aproxima el otoño, la entrada al
colegio de mis nietos, que vendrán a casa, en fin, comenzamos con la rutina
de todos los años, que sea para bien.