Comienzan las Olimpiadas 2012 en Londres, como forofo
seguidor de este universal espectáculo, tengo entrada de primera fila en el
mejor sillón de casa, ahí pienso estar desde la ceremonia de inauguración hasta
el fin de fiesta, sin olvidar los problemas de casa que no son pocos.
Desde que en el año 1896 se celebraron
en Atenas las primeras Olimpiadas de la era moderna, gracias a Pierre
de Coubertin, este evento se han
celebrado cada cuatro años, siendo las
únicas excepciones las ediciones de 1916, 1940 y 1944, debido al estallido de
la Primera y Segunda Guerra Mundial.
El lema desde su
origen fue “Citius,
altius, fortius” , es una frase que significa “más rápido, más alto, más fuerte”, desconozco las causas pero creo
que olvidó incluir algo más que los propios atletas se encargan de manifestar y
es “a follar mas”, según los datos dados, la
Villa Olímpica estará provista de 150.000 condones gratuitos.
Cada deportista tocará a unos 15 y no son muchos, se
terminarán agotando, como sucedió en Sidney 2000 (se repartieron 70.000) y
Pekín (80.000).
Según un artículo en la ESPN (en inglés)
sobre "los otros juegos", los que no se ven y transcurren en habitaciones de la
Villa Olímpica, cafeterías, discotecas e incluso matorrales: los Juegos Olímpicos del Sexo, competición a la
que se dedican con fogoso interés “el 70 o 75% de los deportistas”,
es lo que ha dicho el nadador norteamericano Ryan Lochte. “Hay un montón de sexo“, zanjó la guapa deportista
del equipo norteamericano Hope Solo. Los españoles, sin querer dar la cara, realizan el mismo tipo de manifestación, es más, algunos que son eliminados a las
primeras de cambio se quedan en la Villa Olímpica
por “si pillan”.
Que no nos sorprenda, son altos, son atléticos, son jóvenes
y con ganas de comerse el mundo, de momento, se comen unos a otros de forma mas que agradable, además es fácil entrar al sexo contrario, no hay que preguntar "¿estudias o trabajas?" o "¿me das un cigarrillo?", simplemente ¿que deporte practicas?, lo demás, viene por añadidura.