Estoy entretenido
con la lectura de “Historia secreta del Sexo en España”
de Juan Eslava Galán, lo estoy disfrutando, hacia tiempo que no me reía
tanto con algunos de los pasajes históricos y el tratamiento que en cada unos
de ellos le dan al sexo. En unos de los apartados el autor, ya metido en el Renacimiento, publica lo siguiente:
“Los provechos que se
siguen de dormir con la mujer son estos: lo primero, cumple mandamiento que
manda Dios cuando dixo: creced y multiplicaos y poblad la tierra; lo segundo,
conservamiento de la salud; y lo tercero, que alivia el cuerpo; y el quarto,
que lo alegra; y el quinto, tira melancolía y el cuydado; y el sexto, derrama
los bajes que están allegados al corazón y al meollo; y el séptimo, tira el
dolor de riñones y de los lomos; y el octavo, aprovecha a todas las dolencias
flemáticas; la novena, pone apetito de comer; y la décima, guarece las
apostemaciones de los miembros emutorios; y la undécima, agudiza la vida de los
ojos.
Lo escrito en cursiva es obra de Juan
de Aviñón médico español que estuvo al servicio del arzobispo
de Sevilla, autor del libro titulado "Sevillana medicina", en su obra expone las enfermedades acaecidas en esa ciudad
durante el periodo que va desde el año 1353 hasta 1582. Su nombre antes de convertirse al
cristianismo era Moses ben Samuel de Roquemaure. En su trabajo recomienda la práctica frecuente del
coito por las razones que ya hemos visto.
También había otros bachilleres que decían
lo contrario así se puede leer que, “la lujuria es el peor vicio porque el hombre pierde su húmido
radical por dos partes, la una por delante y la otra por el liquido que derriba
el cerebro por medio de la médula espinal”.
Sin duda debe ser un libro entretenido. Juan Eslava Galán es un gran escritor. He leído algunas de sus obras y siempre me han gustado.Un saludo
ResponderEliminarLo que he leído suyo aparte de este, han sido temas relacionados con la Historia de España y Universal tratada de "otra" forma.
EliminarSaludos
Debido a los buenos consejos que Don Juan de Aviñón nos daba a los sevillanos para cuidar la salud, le dedicamos una calle.
ResponderEliminarLa calle Juan de Aviñón esta situada frente a los Jardines de Murillo justo a la altura del monumento a Colón.
Estos consejos tratamos de seguirlos al pie de la letra, aunque a veces a la "parienta" le duele la cabeza y lo deja a uno a dos velas.
Un abrazo, Emilio.
Es una calle muy merecida. En cuanto a lo otro, es el argumento que nos dan a todos. :))
EliminarSaludos
Estos sabios doctores, Juan de Aviñón,o Huarte de San Juan que estudiaron las teorías de los" humores" sabían lo que decían. Pero el cristianismo, con sus grandes lecciones de moral y la Contrarreforma acabarían ensuciando la libertad del cuerpo.
ResponderEliminarCon lo sano que es este ejercicio... XD.
Abrazo
Cierto, mucho cristianismo y mucho cura, pero estos, en la Edad Media, eran los que regentaban en las mismas Iglesias los burdeles decían que para evitar enfermedades, por ello cobraban, y no digamos de como estos eran cuidados muy una barragana y hoy por una sobrina.
EliminarSaludos
Otro libro a la lista, llevo retraso y no avanzo, es el puñetero ordenador que se lleva las horas de luz. Que tengas un buen día, abrazos
ResponderEliminarReparte el tiempo, la lectura también da ideas para trasladarlas al ordenador, un ejemplo es esta entrada.
EliminarSaludos
Yo me quedo con el mandamiento divino de creced y multiplicaos; luego hubieron y hay algunos que le pretenden enmendar la plana a Dios, pero así somos los hombres, limitados pero pretensiosos de ser lo que no somos. Otra cosa es la lujuria, que habla del uso ilícito y no del uso del matrimonio.
ResponderEliminarUn abrazo
Aunque no comparto nada de lo que dices, salvo en el hecho de que los hombres somos limitados pero pretenciosos, respeto tu opinión.
EliminarUn abrazo.
Llevar una vida sexual equilibrada, además de placentera es muy sana. Yo he oído decir que hasta para los que les ha dado un arrechuche en el corazón, mientras más tiren de riñones, mejor que mejor. Así que con perdón por la expresión, mientras el muñeco baile a follar más que los monos, que está vida cuatro días son. Por cierto Emilio Manuel, y hablando de curas, te acordarás que en tiempos del franquismo todos los curas tenían a su cargo una sobrina que la pobrecita se había quedado huérfana, porque a sus padres los asesinaron los jodidos rojos, y claro el cura como alma caritativa que corresponde y para eso han sido llamados, cuidaba de la sobrina, y la mantenía caliente en invierno y fresquita en verano.
ResponderEliminarUn abrazo Emilio Manuel.
Llevar una vida equilibrada, es bueno para todo, y equilibrado en el cuerpo humano entra también la haciendo de follar, en cuanto a los de las sobrinas, eso lo he manifestado un poco más arriba y hace referencias el libro incluso con historias más escabrosas, es que la Iglesia siempre ha sido un mucho hipócrita.
EliminarSaludos
¡ Juan de Aviñón for president!
ResponderEliminarNo hay duda alguna de que tenia toda la razón, es mas, aún la tiene :))
Salud
Era médico y tampoco hoy te quitan de lo que pensamos, te quitan de beber, de fumar pero no de estar con mujer placentera.
EliminarSaludos
Leído lo cual, me voy volando a ya sabes donde.
ResponderEliminarQue te luzca bien.
EliminarSaludos
Me apunto este libro porque parece interesante y según indicas está en clave de humor, algo que tanto necesitamos. La verdad es que tenemos una edad en la que los riñones no están para muchos trotes, y menos galopes, así que tendremos que ir al paso, que tampoco está nada mal. Un abrazo desde mi mejana
ResponderEliminarAmigo Felipe, posiblemente ahora, con nuestros años, necesitamos más tiempo y eso es bueno.
EliminarSaludos
Tenía el libro en el apartado de "pendientes", pero, después de leerte, le adelanto en el turno, como si fuera la mujer del consejero de Castilla-La Mancha. Ignoraba todo sobre el médico sevillano, al que ahora mismo coloco en una hornacina civil.
ResponderEliminarNo quiero ironizar sobre dolores de cabeza femeniles y viriles. Imagino que a cada cual le dolerá lo suyo, llegado el caso, pero intuyo que hay en ello un poco de leyenda negra. O quizá sea el resultado de la educación esa a la que te refieres con tus curas particulares. Con esos antecedentes, no sé ni como hemos llegado hasta aquí medianamente equilibrados.
En suma, gracias por la crítica literaria.
Mujer no te pongas así con eso de los dolores de cabeza, ya sabes, son cosas de hombres :-)).
EliminarCada uno pertenece a su época y a su educación, estudie con los curas durante muchos años en unos momentos en los que hasta meterse las manos en los bolsillos era pecado, no ha sido fácil quitarse aquella represión de encima, unos lo hemos conseguido otros se quedaron en el intento y algunos ni lo intentaron.
Espero que te rías con un libro de historia contada de forma distendida, de todos modos no me gusta hacer crítica ni cuando estoy en los club de lectura a los que pertenezco, solo reflejo mis apreciaciones.
Un abrazo.
El párrafo último se nota de dónde viene...
ResponderEliminarY es que la historia nos cuenta extensiva y descriptivamente de las muchas falacias de la iglesia, de su pro la boca muere el pez y eso,ja,ja,ja
Me quedo con esa tira de cosas estupendas que proporciona el sexo y que leídas así, en ese lenguaje, son divertidísimas.
Un beso.
Aún recuerdo cuando se nos decía que si nos marturbamos se nos secaría el seso y no serviríamos para nada, esto dicho a los 12/13 años todos los días, acojona un rato. ¡¡Cuanto mal hizo la iglesia en España!!
EliminarUn abrazo
Pues éste va a caer pronto, porque con el fino humor de Eslava Galón, tiene que ser buenísimo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Que lo disfrutes.
EliminarSaludos
No tiene desperdicio alguno, que Genio¡¡¡
ResponderEliminarIgual estaba realizando grandes estudios sobre la satisfacción e insatisfacción y a poquito que observo noto la diferencia.
Beso Emilio ♥♥
Tampoco hay que observar mucho en el caso del médico.
EliminarSaludos