No quiero vivir en este país
de mafiosos donde la cadena de favores se hace continua, donde la iniquidad es
fuente de todo tipo de males, parte de la pobreza que están llegando a algunas
de las capas sociales se debe a estos favores que arrebatan los recursos.
No quiero vivir en un
país, donde tenemos una educación ineficaz que no prepara a la gente para
servir al país, que no educa en el respeto a lo público, que no forma a
ciudadanos solidarios, participativos, con conciencia, imaginativos, unos
ciudadanos capaces de velar por lo de todos.
No quiero vivir en un país
donde las fuerzas de seguridad se saltan los derechos humanos a la torera, basta ver las últimas manifestaciones, luego los políticos les conmuten una penas y justifiquen lo injustificable, cuando son delitos -las torturas- de lesa humanidad.
No quiero vivir en un país donde la justicia se permite el
lujo de emitir sentencias a los 20 años de haber juzgado el delito, una
justicia lenta e ineficaz en delitos de cuello blanco no es justicia cuando a
estos se les deja libres y al “desgraciado” le cae todo el peso de la ley. No
quiero vivir en un país donde las sentencias son políticas y no justas.
No quiero vivir en un país donde el derecho a la información
ha desaparecido, los medios de comunicación se pelean entre ellos olvidando el
deber de informar dejando claro lo que es información de lo que es opinión.
No quiero vivir en un país donde cada vez más se cuestionan
valores de carácter humanista, poniendo en primer lugar a la religión católica
y romana.
En este país se
habla mucho de corrupción, muchos nos preocupamos y llegamos a pensar que debido a ello, no funciona el sistema, no
funciona la democracia, no funciona la ley, cuando si lo pensamos bien, la cosa
es al revés. Como no funciona el estado de derecho, como no
funciona el sistema constitucional, se produce corrupción como una alternativa
para que la gente pueda desarrollar sus diferentes “chanchullos”, por lo tanto quiero
quedarme en este país y tratar de cambiar nuestro sistema constitucional para
hacer que el país funcione y que los corruptos así como los políticos ineptos o incapaces se marchen y/o vayan a la cárcel.