En la actualidad, uno de cada cuarenta
personas que habita en el mundo es inmigrante, según Naciones Unidas hay 191 millones
de inmigrantes de los 6.500 millones de personas que habitamos el mundo. En
España los inmigrantes, antes de la crisis, eran aproximadamente unos 4
millones de los que unos 700.000 son africanos.
Como granadino haciendo frontera con
África, quiero cantaros, aunque es difícil si no se vive en carne propia, como
llegan a nuestras costas arrastrados por las corrientes del estrecho, son los
mejores hombres y mujeres del continente, los mejor formados, los más fuertes, vienen
buscando soluciones a sus problemas económicos, unos problemas que en la mayoría
de las veces Occidente es el culpable.
Es tan habitual su llegada a nuestras
costas que ya no sorprenden, sus penalidades al atravesar el Estrecho de
Gibraltar, cuya zona más estrecha es de 14,4 km con fuertes corrientes y un
elevado tráfico de barcos de todo tipo. No se han hecho nunca estadísticas de
los hombres, mujeres, mujeres embarazadas, niños/as que han muerto en esta travesía;
“son los otros”, son los parias del
mundo, vienen a trabajar en lo que no queremos , muchos vienen de lugares donde
el hombre vio por primera vez la luz hace millones de años y nos les hacemos ni
caso, con una crisis alimentaria y una enorme sequía, hasta los dejamos morir;
mientras el mercado de futuros hace negocio con alimentos que no pueden pagar y
que si no alcanzan los precios deseados se tiran.
Chambao y su cantante la Mari, han escrito una
canción que dibuja perfectamente las condiciones en las que se mueven estos
emigrantes; son músicos andaluces, nacidos en las orillas del Mediterráneo, un
mar del que hace siglos salieron los barcos para descubrí otros mundo y por donde
pasaron múltiples culturas; en la actualidad, se pone todo tipo de trabas a
quien quiere atravesarlo, quién lo consigue, busca unos papeles (documentos
oficiales que los hace “legales”) para poder permanecer en un suelo en el que
solo se les quiere por interés y cuando no, se les expulsa.
CHAMBAO. PAPELES MOJADOS.
EMIGRACIÓN
Miles de sombras cada noche trae
la marea,
navegan cargaos de ilusiones que en la orilla se quedan.
Historias del día día, historias de buena gente.
Se juegan la vida cansaos, con hambre y un frío que pela.
Ahogan sus penas con una candela, ponte tu en su lugar,
el miedo que en sus ojos reflejan, la mar se echo a llorar.
Muchos no llegan, se hunden sus sueños papeles mojaos, papeles sin dueño.
navegan cargaos de ilusiones que en la orilla se quedan.
Historias del día día, historias de buena gente.
Se juegan la vida cansaos, con hambre y un frío que pela.
Ahogan sus penas con una candela, ponte tu en su lugar,
el miedo que en sus ojos reflejan, la mar se echo a llorar.
Muchos no llegan, se hunden sus sueños papeles mojaos, papeles sin dueño.
Muchos no llegan, se hunden sus sueños
papeles mojaos, papeles sin dueño
Frágiles recuerdos a la deriva desgarran el alma,
cala to los huesos el agua los arrastra sin esperanza.
La impotencia en su garganta con sabor a sal,
una bocanada de aire le da otra oportunidad.
Tanta noticia me desespera, ponte tu en su lugar,
el miedo que en sus ojos reflejan, la mar se echo a llorar.
Muchos no llegan, se hunden sus sueño papeles mojaos, papeles sin dueño.
Frágiles recuerdos a la deriva desgarran el alma,
cala to los huesos el agua los arrastra sin esperanza.
La impotencia en su garganta con sabor a sal,
una bocanada de aire le da otra oportunidad.
Tanta noticia me desespera, ponte tu en su lugar,
el miedo que en sus ojos reflejan, la mar se echo a llorar.
Muchos no llegan, se hunden sus sueño papeles mojaos, papeles sin dueño.
Muchos no llegan, se hunden sus
sueño papeles mojaos, papeles sin dueño.
Muchos no llegan, se hunden sus sueño papeles mojaos, papeles sin dueño.
Muchos no llegan, se hunden sus sueño papeles mojaos, papeles sin dueño.
Muchos no llegan, se hunden sus sueño papeles mojaos, papeles sin dueño.
Muchos no llegan, se hunden sus sueño papeles mojaos, papeles sin dueño.