La
temporada de senderos ya está concluyendo, solo nos queda una marcha nocturna a
realizar el próximo mes, de este modo, evitaremos lo que hemos padecido en este
recorrido debido a la humedad del aire dada la proximidad al mar; a causa de ello, una ruta que ha sido fácil algunos la han padecido, la llegada es en Almuñecar,
el pueblo más importante de la Costa Tropical y de los más antiguos del
Mediterráneo habiendo sido habitado, entre otros, por los Fenicios, Romanos y
Árabes cuyos yacimientos se encuentran presentes en el pueblo.
Comenzamos
en el pueblo de Itrabo a una altura de 390 m, siguiendo un
sendero que se encuentra en una cresta de la Sierra de los Guájares
lo que nos permite visualizar, a pesar de la calina que viajó con nosotros hasta el
final, el magnífico panorama que se intuía entre las nubes. El recorrido
transcurre entre dos valles, con un microclima tropical donde se dan
cultivo de esa índole: chirimoyos, aguacates, mangos, guayabas,… al fondo, siembre el Mediterráneo entre brumas. Tras dos horas y media de camino y alguna que otra fuerte pendiente llegamos a Almuñecar enclave Mediterráneo que ha visto pasar por
sus tierras gran variedad de culturas, en el año 755 Abderramán I, fundador
del Califato de Córdoba desembarcó en estas playas hoy plagadas de turistas
tanto locales como foráneos.
Una
vez en Almuñecar unos nos fuimos a
hidratarnos con unas cuantas cerveza y una magníficas tapas de pescado, otros a
refrescarse dándose un baño en la playa hasta que llegó la hora del almuerzo en uno de los múltiples “chiringuitos” existentes.
Todo lo aquí contado: transporte de ida y vuelta desde Granada-Itrabo-Almuñecar-Granada, la marcha con sus monitores, observar un bello paisaje, una camiseta deportiva –regalo de la mancomunidad-, más la comida, todo ello por 18 € ¿Qué más podemos pedir?.
Todo lo aquí contado: transporte de ida y vuelta desde Granada-Itrabo-Almuñecar-Granada, la marcha con sus monitores, observar un bello paisaje, una camiseta deportiva –regalo de la mancomunidad-, más la comida, todo ello por 18 € ¿Qué más podemos pedir?.
Como os decía ya solo queda una marcha nocturna que espero impacientemente, hace tiempo que no veo un cielo estrellado, la polución de Granada lo evita, estoy como los niños en el día de Reyes.