Los entrecomillados los he leído en una publicación de Amnistía Internacional:
“Mediante unas políticas cortas de miras que siembran el temor y la división, los gobiernos están socavando el Estado de derecho y los derechos humanos, alimentando el racismo y la xenofobia, dividiendo a las comunidades, intensificando las desigualdades y sembrando las semillas de más violencia y conflictos”.
En Andalucía, pese a la necesidad de un cambio que eliminara viejos hábitos y que mirara por la gente, hemos visto como se ha realizado un giro copernicano hacia la derecha ultramontana, nos hemos homologado a lo peor de Europa, de ser una Comunidad de “izquierda rosada”, nos levantamos siendo una “derecha a lo bestia” que siembra el racismo y la xenofobia, que rechaza la igualdad de la mujer, que quiere eliminar la ley de Violencia de Genero, que aboga por seguir homenajeando al dictador y aquellos que con el estuvieron, que quiere limitar la libertad de expresión, poner el suelo de Andalucía a disposición de todos los constructores especuladores entre otras lindezas y no me extiendo ni en educación ni en sanidad; ¡¡ah!!, en educación quieren segregar a los alumnos, clases solo de niños vestidos de azul y clases de niñas vestidas de rosa, al estilo Brasil.
Que esto se veía venir, no lo voy a negar, en la negrita ya se explican las causas, políticas y políticos (Susana Díaz y los suyos por un lado y Podemos Andalucía por otro) con escasas miras por no decir nulas; ¿es que no veían lo que ocurría?, son torpes, torpes y torpes.
Llevo una temporada con desazón en la boca del estómago, no quiero hablar de política, ni escuchar esas radios y TV amigas de lo ultramontano que sueltan falsedades a boca llena, esta situación me genera cierto desánimo, parece que es esta política del miedo, las propuestas de VOX, el acercamiento ya realizado del PP y Ciudadanos lo que me la provoca:
“La política del miedo está generando una espiral descendente de abusos contra los derechos humanos en la que ya ningún derecho es intocable y donde nadie está a salvo.”
Pues eso, espero que nos enteremos.