Empresas como Google,
Facebook, Amazon, Netflix o la española Inditex trabajan con algoritmos que no es otra cosa que “un conjunto ordenado de
operaciones sistemáticas que permite hacer un cálculo y hallar la mejor
solución a un tipo de problemas”, ya no necesitan trabajadores, utilizan números
y máquinas que los analizan, es cierto, todavía el sistema hay que ajustarlo
para evitar que Amazon te recomiende los mismos libros que tienes en casa, o
bien que Facebook censure una foto, bien porque se le ve un pecho a una madre que da de
mamar a su hijo, o ver una niña desnuda aunque sea aquella emblemática foto de
una niña sin ropa que huye de una bomba napalm en la guerra del Vietnam en 1972, o bien rechaza obras de arte que, como "el origen del mundo" de Courbet, hieren la sensibilidad de esos números; según dicen, estos pequeños fallos se irán corrigiendo con el tiempo.
Foto censurada por Facebook |
"El origen del mundo" Courbet. Foto censurada por Facebook |
Hasta no hace mucho, la huelga
era el arma de los trabajadores, -aún lo sigue siendo, pero cada vez tiene menos
peso.
En una sociedad tecnológica movida por
algoritmos ¿a quién le va a importar una huelga?, ¡¡los algoritmos no hacen
huelga y trabajan las 24 horas!!, los trabajadores y la sociedad en general tendrá
que ponerse las pilas si no quiere que las máquinas sepan más de nosotros, que
nosotros mismos o, lo peor, que seamos sustituidos, ya lo somos, por números y máquinas y que solo unos pocos se beneficien de ello.
Acabo de leer que hay algoritmos que ayudan a escribir o mejor aún a modelar un libro, no se donde vamos a llegar.
Acabo de leer que hay algoritmos que ayudan a escribir o mejor aún a modelar un libro, no se donde vamos a llegar.