En
el día de ayer, leyendo el blog
“El Periscopio” de la periodista María Rosa Artal, no me podía creer lo que leia, informaba que en el BOE del
24 de febrero del 2015, se había publicado la “el currículo de la enseñanza de
Religión Católica de la Educación Primaria y de la Educación Secundaria
Obligatoria”, me fui directamente el BOE y allí estaba, desde la página
15.739 a la 15.767, 28 páginas de insensateces.
Quiero recordar lo que dice
nuestra Constitución en el artículo 16
apartado 3º, “ninguna confesión tendrá carácter
estatal. (a continuación una de las malvadas coletillas de nuestra Constitución) Los poderes públicos tendrán en
cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las
consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás
confesiones”, la religión
católica se cuela en el Boletín Oficial del Estado, indicando grandes lindezas,
como:
“A la Jerarquía eclesiástica le corresponde señalar los contenidos
de dicha enseñanza… [...] será de oferta obligatoria para los centros y de
carácter voluntario para los alumnos y alumnas”. Hay que justificar los 700 millones de euros que
el Estado entrega a la Iglesia (pagado por todos los españoles, sean católicos
o no) en concepto de profesorado que la misma Iglesia selecciona sin
intervención educativa del Estado. La Iglesia tiene el control total de lo que
se imparte y de cómo se evalúa al alumno en esa asignatura, vamos, una flagrante
vuelta atrás.
Continuo leyendo un
conjunto de sinsentidos que niños/as de corta edad han de memorizar, una de
ellas es otra perla, en la que se dice que tiene que saber el alumno: “Reconocer
la incapacidad de la persona para alcanzar por sí mismo la felicidad”. ¿Cómo
se puede decir tal tontería?
Como antropólogo me
intereso especialmente por el apartado al que hace referencia a esa cuestión e igualmente por
el Bloque 3 en el que busca la relación
entre la razón, la ciencia y la fe, entre las notas se puede leer está que
dice: “Reconoce con
asombro y se esfuerza por comprender el origen divino del cosmos y distingue
que no proviene del caos o el azar”, esto no es otra
cosa que la doctrina rechazada por el mundo científico llamada CREACIONISMO, la
iglesia española vuelve a etapas medievales; al alumno se le pone en la
disyuntiva de aprobar religión o ciencias ya que con la doctrina de la iglesia
son incompatibles, debemos de olvidar a Darwin y su teoría de la evolución o del Big Bang
y a todos aquellos que han hecho avanzar el conocimiento.
Ante esto, la Conferencia Episcopal se muestra insatisfecha, es lo que tiene cuando uno pide tres y te ofrecen 5, las ofrendas posteriores siempre te saben a poco, mientras tanto Monseñor Rouco Varela arreglándose su pisito por 500.000€, toda una muestra de humildad. Con lo que pienso en estos momentos de este monseñor, de todo lo que pone el BOE, de los curas pederastas de Granada y de todos aquellos que hay en el mundo y del ministro Wert, su dios, seguro que me manda a las calderas de Pedro Botero.
Ante esto, la Conferencia Episcopal se muestra insatisfecha, es lo que tiene cuando uno pide tres y te ofrecen 5, las ofrendas posteriores siempre te saben a poco, mientras tanto Monseñor Rouco Varela arreglándose su pisito por 500.000€, toda una muestra de humildad. Con lo que pienso en estos momentos de este monseñor, de todo lo que pone el BOE, de los curas pederastas de Granada y de todos aquellos que hay en el mundo y del ministro Wert, su dios, seguro que me manda a las calderas de Pedro Botero.