Vaya
por delante mis disculpas por el calificativo utilizado, pero estas palabras han
sido citadas por un político de la
altura del Sr. González Pons, Diputado y vicesecretario del Partido
Popular y martillo pilón de los socialistas, en un mitin de esos en los que
se calienta la boca dijo: “El 80% de las mujeres asesinadas no han
denunciado. Si entre todos no las ayudamos a denunciar, seguirán muriendo. La
confianza que tengan en la sociedad tiene que ser más grande que el miedo que
le tienen al hijo puta que las mata",
mientras tanto la Ministra de Sanidad
Servicio Sociales e Igualdad Social Sra. Mato da la callada por respuesta,
no se entera como no se enteró de que la corrupción estaba y está en casa.
Ante este calificativo uno se pregunta, ¿qué
culpa tendrá la madre de cualquier maltratador cuando posiblemente ella también
fue maltratada?, ¿no se da cuenta de que con su insulto sexista está maltratando
a la mujer?, este diputado no entiende que la lucha de la violencia contra la
mujer no se hace insultando a otras mujeres utilizando insultos sexistas, él y
su partido no se dan cuentan que la violencia de género es producto de la
desigualdad y que esta van aumentado así como el desprecio hacia las mujeres,
solo basta escuchar las referencias que tanto hombres como mujeres diputadas del
partido popular hacen sobre las leyes de igualdad.
Una de las cuestiones que me resultan
muy preocupantes es el hecho de que se diga que la mujer no denuncia, según el Sr.
Pons no lo hacen el 80%, manifiesta que teníamos que ayudarle a que lo hagan;
bien, ciudadanos bien intencionados les ayudamos a una maltratada a denunciar, ¿Qué
ocurre después?, que un juez o jueza tras analizar la situación pone en
libertad al maltratador ¿Cuántas veces hemos leído que tras la puesta en libertad la mujer aparece muerta o apaleada?,
ante esto ¿cómo van a denunciar otras mujeres?, está claro que a nuestra
legislación le falta mucho, falta una policía y guardia civil con conocimientos en temas relacionados con el maltrato,especialmente en zonas rurales, jueces mas sensibles y especializados; en las cárceles no hay funcionarios que trabajen con maltratadores son muy pocas las experiencias que se llevan a cabo; estamos en
crisis y los recortes han llegado también aquí, en consecuencia, ni se nos
ocurra pedir viviendas para que las mujeres maltratadas puedan vivir con sus
hijos apartadas del maltratador, no digamos la posibilidad de ofrecerle un trabajo con el que pueda iniciar con su familia una nueva vida.
A un político se puede cabrear y
calentar la boca, pero está en sus manos poner los medios para evitar la
violencia contra la mujer; el Sr. González Pons con la frase “hijo de puta
maltratador” ya ha concluido con la gestión política y se ha quedado descansando,
mañana o pasado otro maltratador matará a otra mujer, no se ha hecho nada.
Una de las cuestiones que se me plantean es la información en medios sobre maltrato, basta ver como se encadenan cuando se informa de algún caso, soy partidario solo hacerlo cuando maltratador ha sido condenado, de este modo, se visualizaría que el maltrato está castigado y tiene pena de prisión. No me meto en temas educativos ya que eso lo ha solucionado la nueva ley de educación del Sr. Wert y con la eliminación de la "asignatura educación para la ciudadanía", desgraciadamente seguiremos escuchando el "la maté porque era mía".