No descubro nada nuevo diciendo que
soy amante de la novela negra, para unos un subgénero que en la actualidad ocupa
el segundo puesto en cuanto a interés de lectura detrás del boom de la novela histórica.
La
semana pasada se ha celebrado en Granada la segunda edición de “Granada Noir. Festival Andaluz dedicado al Género Negro”;
como en botica, ha habido de todo, mesas redondas coñazo y otras magníficas,
como no puede ser menos, algunas se han desarrollado en distintas barras de los bares de
la capital, para lo que han preparado tapas especiales uniéndose en la ciudad la tapa y el género negro, un magnífico maridaje entre asesinos y policías atribulados; entre los autores que se han acodado en esas
barras, JUAN MADRID nos contó como
surgió su obra “Días contados” al tiempo que nos exponía algunas anécdotas, nada
agradables, de la censura que le imponían los políticos "ya democráticos" del Felipismo durante el rodaje de la serie “Brigada Central”. No podía faltar LORENZO SILVA acompañados de sus dos guardias civiles Bevilacqua y Chamorro, tampoco falto el comentario de su último
libro “Donde los escorpiones”. Otro autor, lo descubrí nos hace
mucho, fue TONI HILL al que le acompañaba su inspector Héctor Salgado y su trilogía: “El verano de los juguetes muertos”,
“los buenos suicidas” y “los amantes de Hiroshima”, pasaron por
el festival escritores noveles que desean hacerse un hueco en el difícil mundo
de la escritura, dentro del apartado cine se proyectaron y se comentaron varias
películas, entre ellas “Infamus. Historia de un crimen” en la que se cuenta las vicisitudes que Truman Capote pasó para escribir su obra maestra “a sangre fría”, magnífica película;
otra de las películas fue el “Silencio de los corderos”.
Dije antes que se habían preparado “tapas especiales” para este festival, los nombres de esas “tapas” fueron: “Arroz noir”, “Foie en sangre fría”, “Quid pro quo”, “Jazz&Blues”, “Desmembrados semiocultos” o “Vitovacalao”, todo en consonancia con el festival.
Dije antes que se habían preparado “tapas especiales” para este festival, los nombres de esas “tapas” fueron: “Arroz noir”, “Foie en sangre fría”, “Quid pro quo”, “Jazz&Blues”, “Desmembrados semiocultos” o “Vitovacalao”, todo en consonancia con el festival.
No puede haber
festival si no hay premio y en esta ocasión se le dio al cineasta Enrique
Urbizu autor, para mí, de uno de los mejores thrillers realizados en
España, “La caja 507”.
Estamos a la
espera del Granada Noir3 con un deseo, que no se repitan algunos de los pequeños
fallos ocurridos en este. Hasta el año que viene.