Nuestro
primer paso es por el cortijo, hoy abandonado, de la Ermita y del
Palacio Árabe, a su espalda se ubica un centro donde se intenta
reintroducir en toda España el cangrejo autóctono que
desapareció de una gran parte de nuestros ríos a finales de los años 70, por el
envite de la afanomicosis y la degradación de los ecosistemas fluviales.
Las
escasas lluvias caídas durante el final del otoño y todo lo que se lleva de
invierno hace que el terreno lo encontremos bastante seco, como se muestra en
parte del sendero que seguimos.
A pesar de que algunas partes estaban muy secas, las vistas
que teníamos de Sierra Nevada eran impresionantes, pudiéndose ver toda
la cuerda con los dos picos emblemáticos: El Mulhacen y El Veleta, los
más altos de la península
.
Llegamos a la conocida fuente de
Manolo el del Molinillo, donde se bebe agua y se recuperan algunas fuerzas
perdidas por el camino de tanto subir y bajar. En el Pilar donde cae un agua
que hiela tanto en verano como en invierno dice: “Bebemos agua en este pilarillo, en memoria de Manolo del Molinillo". Este señor, fue un curandero muy
venerado en la zona, conocido por el Santo Manuel del Molinillo.
En sus
proximidades nos aproximamos a una pequeña cascada muy metida entre rocas, de
acceso difícil pero de extrema belleza una vez nos encontramos en su reducida
estancia.
El grupo de
senderistas tomando fuerzas en el Cortijo
del Despeñadero
La
Sierra de Huétor vista desde la máxima extensión.
A pesar de la escasez de lluvias,
aún quedaba nieve en zonas de umbría y a una altitud de entorno a los 1400 m.,
la del gorrito es mi esposa que de vez en cuando tiraba mi o me empujaba el culo.
El perfil del recorrido es este, cada color representa 1 kilómetro.
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Las fotos son todas de mi propiedad. Emilio
Manuel M.