Caricatura de Emilio M. pintada por su nieto Hugo (5 años) |
Estamos a mediados de Agosto, hace calor, las meninges se nos calientan y no damos pié con bola; escribir algo sesudo es imposible cuando solo se piensa en ir a la playa, a la piscina o pasarlo en la sombra tomando una cervecita, ya me diréis que se puede hacer con temperaturas de 40º y sin un alma en la calle.
Si a lo anterior, le sumamos las vacaciones de los nietos y como entretenerlos todo se complica un poco más. Esta semana se me ocurrió decirle a mi nieto Hugo, dibújame, el chaval que tiene 5 años se puso manos a la pizarra y al rotulador, ahí me tenéis, la verdad sea dicha me parezco bastante: una frente despejada, no olvidó las gafas, ni la barba. Lo de PIPI, soy yo, su abuelo, es una deconstrucción de la palabra: papa, así me llama desde que aprendió a hacerlo, un poco cursi pero me gusta; con respecto a la caricatura, no se que diréis, creo que me parezco al de la foto ¿verdad?, son ojos de abuelo, lo reconozco.