Su promotor, el senador estadounidense Gaylord Nelson, instauró este día para crear una conciencia común a los problemas de la contaminación, la conservación de la biodiversidad y otras preocupaciones ambientales para proteger la Tierra.
Las Naciones Unidas reconocen que la Tierra y sus ecosistemas son el hogar de la humanidad, de igual manera, están convencidas de que para alcanzar un justo equilibrio entre las necesidades económicas, sociales y ambientales de las generaciones presentes y futuras, es necesario promover la armonía con la naturaleza y la Tierra
Como idea de generar una preocupación en los ciudadanos de un mundo global la idea es magnífica, aunque ya he dicho en varias ocasiones que no soy amigo de celebraciones puntuales y en este caso menos, basta ver como homenajeamos durante los 365 días de año a nuestra madre tierra.
Vaya aquí una pequeña relación de celebraciones diarias a la madre de la que nacimos:
· El 75% de los bancos de pesca mundiales han desaparecido gracias a la sobreexplotación.
· Se está tirando al mar toneladas de basura tóxica y radiactiva.
· Tala indiscriminada en zonas que son el pulmón de la tierra.
· Contaminación de los ríos y costas marinas.
· La sobreexplotación de los recursos naturales.
· El aumento indiscriminado de las grandes urbes.
· La contaminación del aire por el ingente incremento de vehículos que utilizan combustibles fósiles.
· Utilización de la energía nuclear generadora de catástrofes como la de Chernobil y Japón, que solo sepamos.
· La desaparición de especies con la consiguiente ruptura de la cadena trófica.
· Las guerras, medio mundo está en guerra con el otro medio.
· Abandono de una agricultura natural y utilización de pesticidas y productos químicos perjudiciales para la tierra para sobreexplotar lo que se utiliza.
· Matanza de animales: Ballenas, animales salvajes, etc…
· …
Con estos hechos, más que celebrar el Día de la Tierra, creo que estamos celebrando su extinción; no parece que ni nuestros gobernantes e incluso ni nosotros mismos somos conscientes de lo que estamos haciendo y del futuro que estamos dejando a nuestros hijos, hay que crear conciencia de un lema que más o menos viene a decir “quien destruye, reconstruye” son muchos los países que tienen muchos deberes pendientes, entre ellos España, no somos un país que trate bien a su entorno. Dicen que este año serán 500 millones de personas en 85 países, de los algo más de 6.000 que somos, los que celebraremos el Día de la Madre Tierra, si esto sirviera para plantar una pequeña semilla que generara una elevación del nivel de concienciación sería algo que la misma tierra agradecería y nuestro hijos igualmente.